Posturas de flagelacion
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Sin duda, una de ellas que facilita mucho el que la flagelacion sea para ambos una experiencia interesante, es aquella en la que la sumisa permanece apoyada sobre sus pies y “anclada” con los brazos separados y alzados, atados o no a un arnes elevado. Es una de las mejores, especialmente si existe un radio libre de unos 5 metros, lo que permite infinitas posibilidades y cambios de ritmo y de lugar de impacto. Pero cualquier postura es susceptible de desarrollar interesantes combinaciones. La mas sofisticada quizas, aquella en la que la sumisa esta como describo al principio, pero permanece totalmente suspendida, a escasos centimetros del suelo. Sin embargo, aunque esta postura ofrece tentadoras posibilidades tanto en su forma usual como invertida (es decir, cabeza abajo, algo que solo deberia hacerse por cortos espacios de tiempo y tanteando las capacidades fisicas de la azotada) –el cuerpo se mueve a impulsos del propio peso, de los golpes, de las contorsiones de la sumisa-, lo cierto es que se hace sumamente dificil la precision de los golpes para un Dom no experto. Por eso, en caso de suspensiones, es mas sencillo, especialmente al principio, proceder a una suspension total o al menos parcialmente controlada, donde el cuerpo de la sumisa no este expuesto a los movimientos involuntarios consecuencia de la gravedad.
Desde luego, las posturas verticales y semiverticales no son las unicas que se pueden emplear placenteramente en la Flagelacion Erotica: tras una cierta experiencia, se pueden usar tambien posturas y escenarios horizontales, combinados o no con bondage. (Por cierto, al fustigar sobre determinados tipos de bondage, se consiguen a veces marcas que algunas y algunos juzgan como espectaculares, cuando se retira el bondage.).
Quizas el neofito deberia comenzar con la postura clasica para el latigo de un cuerpo sobre nalgas y espalda: ella de pie, de espaldas al Dominante, brazos recogidos (o atados) al frente y torso ligeramente inclinado hacia adelante.
Desde luego, una combinacion con bondage, en postura horizontal, tambien resulta muy adecuada para los comienzos.
