Precauciones, donde y como azotar

Cuando vemos en un espectaculo de circo o en una competicion como el profesional hace restallar el latigo supuestamente sobre el rostro de su ayudante, sin que este se inmute, en realidad estamos viendo un truco: lo que ocurre es que la tecnica y la experiencia del artista hace que el latigo restalle ANTES de tocar al ayudante, y cuando finalmente lo hace, se encuentra ya privado de fuerza y resulta inofensivo. La tremenda velocidad que las caracteristicas cineticas del latigo le confieren, hace que no advirtamos el “truco”. No aconsejo que jamas, repito JAMAS, ni tras muchos anos de experiencia, se trate de emular a Indiana Jones al usar el latigo en el marco de un acto de Dominacion. Jamas. Si decide dedicarse a eso, seria mas razonable para usted que se afiliase al Sindicato de Artistas, porque nada tiene que ver con el BDSM y si, a mi juicio, mucho con el Circo.

En todo caso, la practica del restallado sobre una persona, si alguien decide seguir ese estrafalario y peligroso camino, deberia hacerse protegiendo a la misma con ropa de seguridad acolchada, casco integral, gafas de maxima seguridad, etc.

Donde y como azotar:

Sugiero exceptuar de las posibles zonas a azotar la cabeza y especialmente el rostro: un golpe en el rostro puede producir facilmente una marca permanente, incluso con escasa fuerza. Son especialmente sensibles para su uso en un escenario de Dominacion, la espalda, los senos y el interior de los muslos. Los golpes directamente sobre los labios mayores del sexo femenino, pueden desencadenar un orgasmo en desarrollo, frenar la excitacion sexual, comenzarla o anularla totalmente, segun el uso que se haga del latigo, que en esa zona deberia ser el que denominamos corto o de bolsillo, o bien un flogger igualmente corto y de tiras anchas.

Si se golpea la zona de senos, pezones, etc., conviene obligar a la sumisa a mantener la barbilla elevada, y tener siempre presente que si la sumisa no esta firmemente sujeta, puede bajarla inesperadamente por efecto de un golpe, de la tension pre-orgasmica, etc., con lo que el riesgo de golpear en una zona no deseada, es grande. La inmovilidad, voluntaria o inducida forzadamente, puede ser una exigencia basica en muchas sesiones de latigo.

De forma general, independiente del tipo de instrumento que se use para el azote (salvo la mano abierta o spanking en todo caso, siendo muy benevolo), hay aereas del cuerpo que no deberian tocarse (en rojo.), cuyo azotamiento deberia quedarse para casos extraordinarios, usado con prudencia y por manos expertas (en azul), o que pueden ser libremente azotadas, mediando el sentido comun, la prudencia y el conocimiento (aquellas que estan en verde).

A nivel fisiologico, podriamos decir que las zonas peligrosas a priori son 4:

1. Organos internos situados en lugares parcialmente huecos y escasamente protegidos, como los rinones.
2. Tendones, articulaciones y circulacion venosa y arterial, como rodillas, tobillos, cuello.
3. Zonas de especial sensibilidad epidermica : rostro, por ejemplo
4. Huesos planos sin cobertura adiposa y de tamano mediano o pequeno. Ej.: el sacro, la coxis, el craneo, el dorso de la mano y del pie.

Areas que es aconsejable evitar:

No se debe azotar en areas tendinosas y/o articulaciones, o zonas en donde concurren partes oseas, arterias o venas cercanas a la superficie, como son los tobillos, las rodillas y corcovas, el cuello y la cintura escapular (el area de los hombros y la clavicula), la zona terminal y distal de la columna vertebral, con las vertebras soldadas que alli estan a flor de piel (sacro y coxis), y los laterales de la franja abdominal. Tampoco se debe incidir sobre organos interiores con repercusiones graves a los golpes superficiales, como rinones, bazo, etc. El rostro debe quedar totalmente al margen, por el riesgo de lesiones graves y cicatrices visibles y permanentes. La zona ventral, presuponiendo una buena forma fisica, es azotable, pero el Dominante no deberia carecer de experiencia.

El area del sexo femenino debe tratarse con el conocimiento que solo aporta la experiencia, y hasta ese momento la mejor eleccion es hacerlo de forma suave y usando latigos cortos o minis, preferentemente de tipo flogger, y de materiales suaves como la piel vuelta o el terciopelo en anchas tiras.

Especificamente con los latigos, y de forma muy especial con el latigo clasico unilineal, debe tenerse tambien cuidado con aquellas partes del cuerpo que son supuestamente seguras, por el fenomeno de “enroscarse” o “envolver” el latigo sobre las nalgas o sobre la espalda superior, por ejemplo, que consiste en que este abraza la zona a golpear y su punta envuelve los flancos, que no cuentan ni de lejos con las masas adiposas y musculares de proteccion de aquellas. Al alcanzar la tralla final del latigo una velocidad muy superior a la de la parte lineal que golpea en la nalga (ver cinetica del latigo), rodea esa zona y finaliza en los flancos o zona ventral, con una potencia que multiplica varias veces la inicialmente supuesta. Genera las tipicas y topicas huellas de trallazos en los flancos, tan comunes despues de una sesion de latigo inexperto o poco cuidadoso. Cicatrices que suelen tardar en atenuarse, pero que ademas pueden ir acompanadas de sensaciones extremadamente dolorosas, que muchas sumisas describen como una “insoportable quemazon”.

Por eso es necesario asegurarse de que la mayor parte de la energia cinetica que desarrolla el latigo en su vuelo (ver apartado sobre cinetica), se difunde en la zona directamente golpeada, y no en sus flancos o proximidades. Salvo que se tenga mucha experiencia, naturalmente, y lo que se pretenda es, precisamente, enrollar el cuerpo de la sumisa, abrazarlo con el latigo. En esto, la precision es 100 veces mas importante que fuerza o impulso.

Otra zona comunmente aceptada como segura, pero con la que soy de la opinion que se deberia tener cuidado, es la parte interna de los muslos: una zona de alta y rapida “efectividad” sumisa, pero por la que pasan algunos nervios importantes relativamente cerca de la dermis, como el ciatico.

Y recordemos que el tobillo, talon y parte superior del pie esta sustentada por una elevada cantidad de huesos pequenos (area tarsiana y metatarsiana) y con gran numero de tendones y nervios flexores y aductores. No es un buen sitio. Es cierto que en el bastinado (golpear la planta de los pies con una vara semirrigida o cane) se cuenta con la defensa del tejido adiposo, que protege perimetral y zonalmente toda el area plantar, pero dada la influencia que desde alli se ejerce a distancia sobre otros organos y procesos corporales (reflexologia podal), yo no la incluiria como un parte predilecta en los azotes, salvo para personas con solidos conocimientos de reflexologia.

Como norma general, se deben tratar de evitar las areas con fuerte presencia de tendones, puesto que estos carecen de la flexibilidad de los musculos y tegumentos, y de la dureza de las partes oseas, pudiendo generarse las tan temidas roturas fibrilares y las tendinitis (inflamaciones incapacitantes).

Zonas aconsejables.

Los gluteos, es uno de los lugares predilectos para el uso del latigo, tanto por Doms como por sumisas: por su riqueza en tejido adiposo, su total ausencia de huesos, tendones y nervios en la superficie, su abundancia de musculatura estriada (voluntaria) de tipo cuadrado (corta), su riqueza en circulacion sanguinea por la dermis, su normal ocultacion a la vista publica, fuera de situaciones concretas, lo que favorece casos donde tras la sesion se produzcan rojeces o marcas, incluso marcas profundas.

De hecho, los gluteos estan formado en gran parte por el mayor musculo del cuerpo humano, el gluteo mayor o Gluteus Maximus. Ademas, su amplia base de contacto y la ausencia de lugares comprometidos en las cercanias, facilita los animos del flagelante novel. Y su vista, con o sin rojeces, le suele ser grata. Por ultimo, de forma nada inhabitual, en muchas sumisas la fustigacion de las nalgas tiene un directo componente de excitacion sexual.

La zona de los senos femeninos se puede azotar con ciertas precauciones, para evitar que la piel se rasgue, y atendiendo con moderacion a la aureola y al pezon. Depende tambien en buena parte de su tamano, y por tanto del volumen de proteccion adiposa con que cuenten de forma natural. Para personas sin una segura experiencia, podria ser en este caso mas recomendable el uso de un flogger suave, que el de un latigo vaquerizo o bullwhip, por muy espectacular y escalofriante que este resulte.

Que en caso de protesis de silicona, mastectomias, etc., esa zona resulta totalmente desaconsejable, para eso no se precisa ni el SSC ni el RACSA: solo el simple y basico sentido comun. Algo que deseamos presuponer en mas que suficiente cantidad en todo Dominante, por definicion.

Los genitales, usando la cordura elemental necesaria, pueden ser zonas a azotar con el latigo, si bien alguien que no sea un perfecto experto en latigo medio o largo, encontrara mas placentero (por relajante en su uso para ambas partes) la utilizacion de los latigos de bolsillo o latigos minis, especialmente los latigos muy cortos con varias colas de piel vuelta o tejido sintetico, usandolos por ejemplo en forma de molinete continuo, o alternando desde la derecha y desde la izquierda, golpeando con mayor o menor suavidad los labios mayores y la zona vulvar.

Algo en lo que por obvio tampoco creo necesario insistir, es que en los azotamientos eroticos, como en el resto del BDSM, es una buena idea irse acercando a la experiencia de menos a mas, tanteando las posibilidades propias, las capacidades del instrumento, y las caracteristicas y resistencia de la azotada. No esta mal encaminado quien va probando diversas zonas y con diversas y crecientes intensidades: ni todos los latigos son iguales, ni todas las sumisas azotadas reaccionan igual.